
Nuestros trucos para cuidar la ropa
Si hay una cosa de la que nos sentimos orgullosos en Papagayo Vintage, es del cuidado con que tratamos nuestras prendas.
En nuestra tienda física y en la web vas a poder encontrar ropa vintage que si pudiera hablar te contaría diferentes historias de otras vidas anteriores, pero jamás te vas a encontrar algo sucio, roto o deteriorado, porque ahí está nuestro ojo experto para clasificar y cuidar muy bien todo lo que ponemos a la venta.
¿Y cómo hacer para que ese jersey que te acabas de llevar y tanto te gusta te dure más o esa camisa que te compraste en verano puedas seguir utilizándola muchas más temporadas? La clave está en cuidar las prendas según sus necesidades, y a veces es tan simple como un buen mantenimiento.
Si nos escribes a nuestras redes sociales o la web, o si te pasas un día por la tienda estaremos encantados de sentarnos contigo un rato y charlar sin prisas, aconsejándote y explicándote cómo hacerlo. De todas formas, vamos a compartir contigo algunos trucos para que tu ropa en general, te dure más y puedas seguir utilizándola.
Lavar menos, cuidar más.
Aunque parezca absurdo, un factor importante es no pasarse lavando la ropa. Lo que compres en nuestra tienda, nosotros te garantizamos que viene lavado, desinfectado y planchado, listo para que lo puedas utilizar.
Cuando sea necesario lavarla, lo primero que te aconsejamos es que leas la etiqueta: no es lo mismo si es algodón, seda, poliéster o lana, por poner un ejemplo. Si es una prenda delicada, a veces lo más recomendable lavarla a mano en agua fría con un jabón especial y tenderla siempre a la sombra (¡nunca al sol!) bien escurrida. Si decides lavarla en lavadora, procura que sea con prendas similares y en un programa frío. Reserva los programas de agua caliente para cuando te toque lavar sábanas y toallas, pero nunca para la ropa de color.

¿Y si hay manchas?
Si has tenido la mala suerte de mancharte, lava primero la mancha frotando directamente con un buen jabón antes de meterla en la lavadora, o es muy probable que cuando la saques, la mancha siga estando.
A la hora de planchar, te decimos lo mismo: a veces basta con tender bien la ropa para evitar que se formen arrugas. Si vas a planchar, leer bien los símbolos que te indican qué tipo de tejido es para adecuar la temperatura de tu plancha y evitar quemarlo.
Rotos, remiendos y creatividad
También puede pasar que se te haya caído un botón, se haya descosido una parte de la prenda o que se haya roto. En este caso, ¡que no cunda el pánico! también puede haber solución.
Si no sabes cómo coser un botón o arreglar un descosido puedes buscar tutoriales en Youtube (los hay a miles) e intentar hacerlo tú mismo, aunque nuestra recomendación es que le pidas que te enseñe a tu madre, abuela o a alguna persona cercana y que sepa hacerlo: es muy fácil y te va a servir para toda la vida. Si aun así, no tienes a nadie cerca, siempre puedes ir a algún sitio de costura en tu ciudad a que te lo arreglen. El coste será económico y podrás seguir utilizando esa prenda. En el caso de un roto o algo que en principio, haga la prenda de ropa inservible, puedes llevársela también y que te haga una valoración para ver si se puede arreglar o qué otras ideas se le ocurren (por ejemplo, poner un parche de otro tejido, acortar unas mangas o hacer alguna modificación para que no se note). La clave está en tener creatividad, ¡seguro que se puede hacer algo!
Por último, también es importante cómo guardamos las prendas: si es algo de temporada o que solo te vas a poner de forma puntual, guárdalo listo para poder volver a usarlo cuando lo necesites. Un último consejo: los jerseys no deben quedar chafados ni apelmazados, mejor colgados de perchas.
También puedes guardar tus prendas en fundas. Si quieres que te duren en perfectas condiciones, ¡lo importante es cuidarlas para que puedas disfrutarlas durante mucho tiempo!
Deja una respuesta